Edificio ubicado en el centro de Sevilla, catalogado y sin posibilidad de intervenir en sus fachadas, así como en su patio existente.
Con forma de “L” y con una fachada reducida nos hace obtener viviendas interiores.
La intervención, por tanto, se centra en el interior. Dotar de luz el interior es el objetivo fundamental del proyecto, así como la creación de espacios que generen un recorrido visual y de luces que aporten calidad espacial, recorrido arquitectónico e interés visual.
Para ello se opta por la generación de dos nuevos patios, ubicados te tal forma que al llegar al primero, puedas vislumbrar el segundo, manteniendo de esta forma el interés visual, el recorrido y la luz natural en todo el edificio.
Con materiales nobles como el mármol, combinando el blanco con el negro, carpinterías blancas de palillería y huecos esbeltos, se quiere dar al interior un aspecto cálido y elegante, generando un ambiente de sosiego con la luz que entra por los tres patios proyectados.
				
															
								
								
								
								